Las criptomonedas, independiente de su popularidad creciente, siguen siendo vistas como un territorio inexplorado por muchos inversores institucionales. Bitcoin, la estrella de este universo digital, brilla con potencial, pero permanece fuera del alcance de las formas tradicionales de inversión.
Apuesto a que esta realidad formó parte de tu vida diaria: escuchas sobre Bitcoin, te intriga, pero te sientes ajeno a su mundo. Si tú te lanzaste de inmediato, fuiste muy visionario, pero te apuesto a que conoces a muchas personas que sí se sintieron, o aún se sienten, ajenas a este mundo.
Más allá de su rentabilidad, +160% en el 2023 y +1000% en los últimos 5 años, Bitcoin representa una oportunidad de inversión importante debido a su tecnología y planteamiento innovador en políticas monetarias. Pero, y es de esperar que, su naturaleza descentralizada y la necesidad de una custodia segura lo hacen un desafío para muchos. Muchas personas entendemos que el hashrate hace de Bitcoin algo extremadamente seguro, pero existen personas que no tienen tiempo para averiguarlo y prefieren exponerse a una inversión como esta, de forma rápida y eficiente, sin tener que estudiar un whitepaper. Añadamos a esto que sí ha existido una volatilidad y una percepción de riesgo. Acá tenemos un escenario donde incluso los inversores más audaces se muestran cautelosos.
Si eres uno de estos inversores convencionales, ¿cómo participas en el mercado de Bitcoin sin sumergirte en un mundo completamente nuevo y complejo?
El problema se intensifica a medida que el mercado cripto se expande. Las criptomonedas no son una moda pasajera; están aquí para quedarse y están transformando el panorama financiero. En el ámbito de las inversiones, ignorar Bitcoin podría significar perder una oportunidad de oro para diversificar y fortalecer el portafolio. Hago el hincapié en inversiones, porque entrar al tema de que Bitcoin será estándar monetario es otro mundo mucho más extenso.
La brecha entre el mundo cripto y los inversores tradicionales no es solo un obstáculo; es una puerta cerrada a un futuro financiero potencialmente próspero.
Aquí es donde los ETF Spot de Bitcoin entran en juego, actuando como el puente entre dos mundos. Estos fondos cotizados en bolsa permiten a los inversores comprar acciones que representan Bitcoin real, sin la necesidad de adquirir y almacenar la criptomoneda. Como cualquier otro ETF, se negocian en las bolsas tradicionales, ofreciendo la familiaridad y seguridad que los inversores institucionales y minoristas conocen y confían.
Ojo, ETF de Futuros de Bitcoin existen. Un ETF Spot de Bitcoin invierte directamente en Bitcoin real, reflejando su precio actual, mientras que un ETF de Futuros de Bitcoin invierte en contratos de futuros, basándose en expectativas del precio futuro y sin requerir la custodia directa de la criptomoneda. Los ETF Spot ofrecen exposición directa a Bitcoin, y los de Futuros, una forma indirecta y especulativa de invertir en su movimiento de precios futuro.
Con los ETF Spot de Bitcoin, puedes participar en el mercado de criptomonedas con la facilidad y seguridad que ofrece el mercado de valores tradicional. Esta innovación abre un mundo de oportunidades, permitiéndote capitalizar el potencial de Bitcoin mientras gestionas tus inversiones de una manera más convencional y regulada.
Los inversores que antes se mostraban escépticos ahora se beneficiarían de la apreciación de Bitcoin, mientras gestionan los riesgos asociados con las inversiones en criptomonedas de manera más eficiente. Muchas personas indican que el rally de Bitcoin de este segundo semestre (2023) se debe a este probable e inminente estreno.
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